miércoles, 8 de febrero de 2012

Ayer murió un conocido de mi familia, era un señor de edad, era bueno para ayudar a las personas, siempre recordaba a su madre y familiares, y se conmovía al hablar de ellos, tenia una gran pena guardada por que sus hijos se fueron lejos y lo olvidaron. 
Quizás a causa de la soledad de aquella casa creo una pensión para jóvenes universitarios fueron muchos años en los que trabajo para todos aquellos que vivieron en aquella casa. 
Era un soñador, su casa era el mejor reflejo de aquello cada espacio por pequeño que fuese tenia su encanto propio, su magia. Ayer aquel señor murió soñando, dormido lo encontraron. Hoy después tanto tiempo viviendo solo, cargando con penas del pasado, sirviendo, contactando a sus familiares y muchas cosas mas, hoy llegaron todos ellos a llorar su partida, aquellas personas que quizás compartieron pequeños momentos con el, y muchas otras que a veces lo ignoraron, llegaron allí y están con el, nadie puede decir porque lo han hecho ahora, ahí muchas cosas de por medio, una casa, su fortuna, o quizás el amor... Aquel hombre descansa desde ayer y por siempre, su felicidad esta en este momento acompañándolo, sus hijos y familiares... pero su felicidad en este mundo hubiera sido mejor si la compañía de ellos hubiera estado en momentos importantes para el... Siempre se espera la muerte para poder valorar a las personas pero la muerte es demasiado tarde también para reaccionar a hacer algo, ojala pudiéramos aprender a valorarlas siempre en cada momento de nuestras vidas, y saber que aun siendo pequeño el momento compartidos con esas personas nos hicieron aprender algo y crecer... Que descanses en paz, aun ese pequeño momento en el que te conocí  aprendí cosas de ti y esta ultima creo que ha sido la mas valiosa... 


No esperes a que suceda algo para poder expresar lo que sientes o valorar a los tuyos todos estamos de paso en este mundo y nadie sabe cuando es el momento de partir.

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